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domingo, 23 de agosto de 2020

Comentario al Evangelio del XXI Domingo Ordinario, Ciclo A. Evangelio de Mateo 16,13-20.

 

Comentario al Evangelio del XXI Domingo Ordinario, Ciclo A.
Evangelio de Mateo 16,13-20.
 
Yeshúa y sus talmidim (discípulos) se encuentran descansando en la región de Cesarea de Filipos, y en medio de la conversación, haRab miNatzrat (el Maestro de Nazaret) lanza una pregunta a sus amigos: "¿Quién dice la gente que es el Ben haAdam (Hijo del Hombre)?", a lo que los talmidim responden lo que han escuchado de la gente: tal vez sea Yojanán haMatbil (Juan el Bautista), Eliyahu (Elías), Yirmiyahu (Jeremías) o alguno de los profetas reencarnado en su Maestro, pues la reencarnación era una creencia común en el judaísmo del siglo I, y aún hoy en día, muchos judíos creen en la reencarnación. 
 
Después de escuchar lo que dice la gente, ahora pregunta a sus talmidim: "Y para ustedes, ¿Quién soy Yo?"
Probablemente, aquellos hombres se sintieron en apuros, pues cada uno tendría su propio concepto de Él, pero Shimeón (Simón) abre su boca y le dice: "Tú eres haMashíaj (el Mesías), el Hijo del Elohim haJai (el Dios Viviente)", a lo que Yeshúa responde con alegría: "Dichoso tú, Shimeón ben Yoná (Simón, hijo de Jonás), pues tu humanidad no te ha revelado esto, sino mi Padre que está en el Cielo".
 
Yeshúa deja claro que nadie puede reconocerlo como Mashíaj por su propia cuenta, sino solo por inspiración divina.
Y continúa: "Y yo te digo a ti que tú eres Kefa (Pedro= roca), y sobre ti, roca, edificará mi Iglesia". Solo Kefa será la roca segura sobre la cual la Iglesia puede fundarse. Cualquiera que busque ser talmid de Yeshúa, pero no se someta a Kefa, no tendrá fuerza ni soporte, y será ilegítima. 
 
"Y las puertas del Hades no la vencerán..." Hades es la traducción griega del hebreo "Sheol", es decir, la morada de los muertos, y cabe mencionar que las puertas eran el lugar más fortificado de una ciudad y símbolo de poder militar, y en muchos lugares cercanos a Israel, había estatuas de querubes, figuras híbridas de león con cabeza de hombre, alas de águila y patas de león, simbolizando el poder de los dioses. Yeshúa promete que ningún poder podrá vencer a su Iglesia, ni siquiera la muerte. 
 
"Y Yo te daré las llaves del Maljut haShamáyim (Reino de los Cielos), y lo que ates en la tierra quedará atado en los cielos, y lo que desates en la tierra, quedará desatado en los cielos". En tiempos de Yeshúa, tener las llaves era un símbolo de autoridad, y en toda hacienda, después del dueño, el mayordomo era quien tenía la mayor autoridad, siendo capaz de tomar decisiones y administrar los recursos del amo, además de permitir por su autoridadla entrada al cielo. Kefa es el mayordomo de Yeshúa, es decir, el segundo al mando de los demás Sheliajim (Apóstoles). También tiene el poder de "atar y desatar", que en el lenguaje rabínico implica "prohibir y permitir", es decir, el poder de juzgar, de legislar e interpretar la Biblia con autoridad. 
 
Después de decir estas cosas, Yeshúa prohibe tajantemente a sus talmidim decirle a nadie que Él es haMashíaj, pues pueden confundirlo con algún caudillo de oposición contra los romanos.
En esta lectura, Yeshúa nos permite ver el gran don y la gran responsabilidad que tiene el Vicario de Cristo, a quien debemos obediencia y respeto. 
 
Nunca olvidemos orar por el Papa, para que Adonai siempre lo asista y lo acompañe. 
 
- Abbir ben Ismael.

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YESHUA HAMASHIAJ